REVISTA 83- DICIEMBRE 2020
El fuerte crecimiento del mercado europeo de cafés especiales ha sido impulsado, en parte, por el continuo crecimiento, también, del consumo fuera de casa. Las cafeterías especializadas de las ciudades europeas de mano de sus tostadores y micro tostadores, lideran el camino de la introducción de estos cafés de alto valor. La demanda de cafés especiales coincide con un creciente interés por los productos producidos de forma ética y sostenible y la curiosidad de los consumidores sobre la historia de su café.
¿POR QUÉ EUROPA ES UN MERCADO INTERESANTE PARA EL CAFÉ DE ESPECIALIDAD?
En primer lugar, el continente europeo alberga más establecimientos y tostadores de café, además que los consumidores aprecian las excelentes cualidades organolépticas de los cafés diferenciado por lo que están dispuestos a pagar más. Es así, que esta nueva demanda de cafés de especialidad ha traído consigo nuevas formas de actuar en el café europeo, desde la misma obtención del producto a la oferta en carta de esos cafés. Algunas cafeterías, por ejemplo, después de volverse lo suficientemente grandes, comienzan a obtener sus granos verdes directamente de origen, apoyándose, a menudo, en su antiguo proveedor, generalmente un importador, para obtener apoyo financiero, control de calidad y logística. Mientras estos mismos establecimientos y también otros, presentan a sus clientes cartas de cafés nunca antes vistas, con orígenes y preparaciones que llaman la atención del consumidor.
En esta pandemia, se ha demostrado que los micro tostadores y cafeterías independientes tienden a mostrar un nivel más alto de innovación, poder de marketing y lealtad de los consumidores en sus ventas por plataformas o tiendas web. Ahora bien, al margen de este 2020, todos los mercados europeos habían mostrado hasta ahora, una demanda creciente de cafés especiales, destacando el tamaño más pronunciado del segmento representado por los países del noroeste de Europa. Esta zona está marcada por mayores niveles de ingresos y conciencia de los consumidores, así como por una cultura cafetera más desarrollada que la del resto del continente. Además, el interés de los europeos por conocer otras culturas, favorecen a los consumidores por los orígenes del café; la responsabilidad social, bienestar de los productores y temas ambientales, lo cual estimulan su interés en el cultivo de café sostenible.
El análisis por países señala, un año más, a los cafés de alta calidad como foco principal del mercado escandinavo.
Países como Suecia, Dinamarca y Noruega, considerados actores importantes de este mercado a nivel regional e internacional (Noruega fue el país fundador de la Asociación de Cafés Especiales en Europa) registran las tasas de crecimiento más altas en las ventas minoristas de cafeterías desde 2010 y como resultado el número de cadenas de café y micro tostadores en estos territorios no para de crecer .
Otro país donde crece el mercado de café de especialidad es Alemania, y lo hace, también de mano del crecimiento del consumo fuera del hogar, que en el 2019 aumentó un 5% más respecto al año anterior.
La República Checa, Hungría, Polonia y Rumania, por su parte, son los mercados del este, donde el interés por el café de especialidad crece de forma más destacada. En Rumania, por ejemplo, el número de cafeterías de especialidad aumentó de sólo 3 a más de 90 cafeterías entre 2013 y 2019. El número de cafeterías en Hungría también ha crecido exponencialmente en los últimos años, alcanzando aproximadamente 150 cafeterías de especialidad en 2019.
Fuente: Fórum café
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